En este post vamos a intentar facilitaros un poco esa tarea.

Lo primero que tenemos que tener claro, es si nuestro cubo de basura es redondo o cuadrado, y cuáles son sus dimensiones. Una vez que ya disponemos de esta información, solamente tenemos que realizar una sencilla multiplicación.

En el caso que el cubo sea redondo, multiplicaremos por 1,52 cm el diámetro del cubo, obteniendo con ello el ancho mínimo que deberá tener la bolsa de basura. 

 En el caso de cubos cuadrados o rectangulares, multiplicaremos por ese mismo factor (1,52 cm) la diagonal del mismo, obteniendo igualmente el ancho mínimo de la bolsa de basura.

Después de este post, no hay excusa para equivocarse a la hora de elegir una bolsa de basura. Visitad nuestra sección de bolsas de basura.

Muchas gracias.